Canula nasofaríngea y apnea del sueño

Realmente si hace mas de un año como médico, me hubiesen preguntado sobre la cánula nasofaringea como manejo de hipoplasia del tercio medio nasal, permeabilización de vía aérea superior para tratar SAHOS, me hubiese sentido la mujer más ignorante en el tema, pero eso es lo fantástico de ser mamá de un guerrero; que todos los días aprendo algo nuevo, hasta me ha enseñado de mi profesión, así que gracias hijo. 

Como ya había mencionado antes, el Dr Gilberto Marrugo ha sido la persona que más nos ha ayudado a solucionar los problemas médicos que hemos tenido con esteban por su condición física. 

Les cuento por "encima" con lo que nació Esteban: Nació con el tercio medio de su nariz mas pequeño de lo normal y además su maxilar superior tampoco crece de la misma forma que el resto de su cara, por esto ha tenido múltiples consecuencias como; alteración en el sueño (síndrome de apnea hipopnea obstructiva del sueño o por su siglas SAHOS); trastorno en la deglución de fase preparatoria, enfermedad por reflujo gastroesofágico y esofagitis. Que bobadita ! 

Pero bueno, toda ha tenido solución.

En su primera hospitalización, intentaron colocar su cánula nasofaringea en la nariz pero como era tan pequeña, la cánula estaba totalmente colapsada y respiraba peor que antes. Por eso la Dra Ligia Quintero, la retiro y colocó otra cánula nasofaringea en su boca, como si fuera un pitillo, y por arte de magia, empezó a respirar como nunca antes los había hecho. Ese día fue la primera vez que lo escuche suspirar (tenía dos meses y medio), algo tan básico como eso, pero que marcó nuestras vidas por completo.

Después de operada su nariz, colocaron su cánula por su fosa nasal derecha para mantener permeable su nariz y que no se dañara su cirugía. Nos enseñaron a retirarla, lavarla y volvérsela a colocar; una tarea nada fácil pero que arregló el principal problema de Esteban. 

Les cuento que la cánula es un tubito siliconado que va mas o menos hasta la base de la lengua y no siempre es fácil pasarla por lo menos en el caso de mi hijo. 

Cuando ya llevábamos como 3 ó 4 meses con la cánula, el Dr Marrugo, con algo de incertidumbre, nos propuso ir quitándole la cánula. Yo feliz de quitarle eso porque a veces sangraba cuando la pasaba y obvio no me gustaba. 

Al mes o dos meses de retirarla, Esteban empezó a respirar muy mal durante el sueño, cada noche que pasaba respiraba peor, dejaba de respirar por segundos, lloraba como si se despertara por no poder respirar, se levantaba con los labios partidos por la respiración oral. 

Todas las noches empezaba la pesadilla. Mi esposo no dormía casi por vigilar su sueño.

Finalmente después de tener los resultados del examen del sueño, de buscar soluciones con los especialistas, se planteo como posibilidad de tratamiento, traqueostomia (abertura dentro de la traquea), dada la severidad del caso. 

Ese día salí del consultorio, desconsolada, amargada, impotente una vez más. Solo pensaba otro hueco más!! (ya tenía su gastrostomia). Pero sabía en el fondo que si eso era lo que teníamos que hacer para que Esteban descansara durante el sueño, pues debíamos hacerlo. 

Una noche desesperada y con mucha rabia de ver a mi hijo con muchas apneas, con saturaciones de oxigeno de 70 % pese al oxigeno en casa, decidí irme sola para urgencias (mi esposo estaba de turno). Apenas le avisé a Juan Carlos salio corriendo de su trabajo y nos acompaño al Hospital. 

Ese día nos valoró el Dr. Marrugo y le pedí el favor de intentar colocar la cánula nasofaringea nuevamente. Después de mucho intentar, y bajo la supervisión de la Dra Quintero, entro la cánula nasofaringea, en esta ocasión, del lado izquierdo ya que por cosas locas era la mas grande. 

Inmediatamente la colocaron, Esteban quedó cansado de tanto llorar y pelear. No me di cuenta en qué momento, pero a pesar de todo el ruido externo de Urgencias, bajé mi mirada, y solo escuché en Esteban un suspiro gigante. En ese momento, me di cuenta que mi hijo se había quedado dormido y dormía perfecto. No roncaba, no hacia apneas. Y solo lloré de la emoción. 

No podía creer que esa cánula era la solución una vez más a sus problemas.